Tu paz interior comenzará el día que no permitas que te manejen
Te invito a que tranquilamente te pongas cómodo, cómoda, y en disposición de encontrarte con Dios y de traer a la oración tu vida, tus alegrías, tus penas...
REFLEXIÓN
“Decid Sí, cuando es SÍ y No cuando es NO, todo lo demás viene del maligno” (Mt. 5,37)
Decir que sí no porque quieras o puedas hacer lo que te piden, sino por complacer a alguien o por miedo a perder su amistad o su amor es un atentado contra ti mismo
Conoce tus límites, actúa dentro de ellos y hazlos respetar.
Para volver a recuperar la paz interior del corazón, basta con tomar esas pequeñas decisiones de SÍ o de NO.
Acabamos rezando a la Buena Madre para seguir sus pasos. Lo hacemos juntos:
Hoy me dirijo a ti, María,
para pedirte que me ayudes a escuchar
con confianza la palabra del Señor.
Contágiame tu fe, tu amor y tu esperanza,
para que yo pueda responder sí a todo lo que Dios me pida.
Enséñame a disponer el corazón,
a saber escuchar,
a guardar dentro de mí lo que el Señor va diciendo.
A recibir con generosidad todo lo que Él propone.
Ayúdame a ser fiel y a mantener el rumbo que pide el Señor.
Que no me olvide de dedicar cada día un ratito a charlar con Jesús
y escuchar su voz en la Biblia.