Buenos días, vamos a comenzar la oración de la mañana, pero antes, centrarnos en este momento.
Vamos a guardar silencio, comenzamos a respirar tranquilamente, sentimos nuestra respiración, somos capaces de olvidarnos de todo lo demás, ahora sólo importamos nosotros.
Somos conscientes de nosotros mismos y que ahora, Dios está con nosotros.
Por eso, comenzamos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
REFLEXIÓN
Observamos esta imagen: ¿qué nos dice? ¿Qué nos mueve por dentro al leerla?
Muchas veces necesitamos pequeños recordatorios como estos. Para los desafíos, los miedos, las exigencias de fuera y las que tú te pones.
Dedícate unos minutos a verte, en tu día a día: piensa donde estás siendo Tú,
totalmente, al 100%.
Ahora da un paso más, ¿dónde tienes que darte más?
¿Qué te está frenando para no ser tú totalmente?
Madre del Divino Pastor: RUEGA POR NOSOTROS
Beato José Tous: RUEGA POR NOSOTROS.