SEMANA DEDICADA A LA BÚSQUEDA DE LA PAZ EN NUESTRO CORAZÓN.
Te invitamos a vivir un momento de oración en el que compartir con Jesús cómo estoy ahora mismo. Lo que pasa por mi cabeza, por mi corazón…
Para que nada te distraiga, dedica un minuto en silencio a relajarte. Respiramos profundo, controlamos nuestras pulsaciones y nos ponemos en disposición para rezar.
Programar el futuro sin convertirlo en obsesión.
Una de las cosas que más nos afecta es la angustia o preocupación por el futuro que nos “roba” el momento presente. ¿Qué va a pasar mañana? Hay que ocuparse pero no preocuparse, hay que planificar pero sin obsesionarse por el futuro.
Jesús nos dice: “No os preocupéis por el día de mañana, el mañana se preocupará de sí mismo. Basta con las penas de hoy”
