INICIO
Iniciamos nuestra oración: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
REFLEXIÓN:
"¿Por qué buscáis entre los muertos al que está vivo?" Esta pregunta nos hace superar la tentación de mirar hacia atrás, a lo que fue ayer, y nos empuja a avanzar hacia el futuro. Jesús no está en la tumba, él es el Resucitado, el Viviente, el que siempre renueva su cuerpo que es la Iglesia y lo hace andar atrayendolo hacia Él. "Ayer" es la tumba de Jesús y la tumba de la Iglesia, el sepulcro de la verdad y la justicia; "hoy" es la resurrección perenne a la que nos impulsa el Espíritu Santo, que nos da plena libertad.» (Papa Francisco)
ORACIÓN
En Pascua, con sinceridad, decimos:
- Tú vives, has resucitado de entre los muertos.
En Pascua, con veracidad, decimos:
- Tú vives, la vida es más grande que la muerte.
En Pascua, con fe, decimos:
- Tú vives, y eres la vida.
En Pascua, con seguridad, decimos:
- Tú vives, y nos enseñas el camino de la vida.