Lunes, día 24 de enero de 2002

LA PAZ EN LO COTIDIANO

 

Iniciamos la Semana de la PAZ, en la que cada día dedicaremos una reflexión para poder ser constructores de PAZ a nuestro alrededor.


Y la iniciamos: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén


PENSAMOS EN SILENCIO: 


El conflicto es algo natural en nuestras vidas, es inevitable. Es más, normalmente nuestros desacuerdos son con las personas que tenemos a nuestro alrededor y a quienes más apreciamos: tenemos diferentes experiencias, diferentes visiones de la vida, diferentes puntos de vista que nos llevan a conflictos. 

Estos desacuerdos no tienen por qué crecer y acabar en peleas serias. Podemos usar los conflictos como oportunidades de crecimiento y aprendizaje. 

 

Las personas de nuestro alrededor: familia, amistades, colegas, vecindario, etc., son quienes nos ayudan a tener cubiertas nuestras necesidades básicas de seguridad, supervivencia, autoestima, pertenencia y crecimiento. Son personas que, por otro lado, conocen nuestras fortalezas y debilidades, nuestras tendencias y nuestros puntos críticos. Probablemente podemos tener más conflictos con ellas que con personas extrañas.


Estos conflictos pueden ser la semilla para el aprendizaje sobre cómo construir relaciones más estrechas y duraderas. En este sentido, el conflicto resuelto eficazmente será un auténtico motor de cambio personal que nos ayudará a consolidar nuestras relaciones con las demás personas.

 

Piensa en un conflicto reciente con una persona de tu entorno. Hazte las siguientes preguntas, tratando de dar respuesta a cada una de ellas:

  1. ¿Qué has aprendido de esa situación?
  1.  ¿Qué característica de tu personalidad se ha visto fortalecida?
  1.  ¿Qué nuevas actitudes o herramientas has desarrollado?
  1.  ¿Cómo puedes usar esas herramientas y actitudes en el futuro?
  • Acepta la lección aprendida como algo positivo. 
  • Puedes considerar a la persona con la que tienes el conflicto como algui-en que tiene algo que enseñarte. ¿Podrías hacérselo saber? 
  • Seguramente la relación se verá fortalecida de cara al futuro.



Acabamos nuestra reflexión pidiendo:

Madre del Divino Pastor: AYÚDANOS A SER SEMBRADORES DE PAZ
Beato José Tous: AYÚDANOS A SER SEMBRADORES DE PAZ
Hermanas Mártires: AYUDADNOS A SER SEMBRADORES DE PAZ